El buey mudo

FRASE:
“El silencio de la lengua nos ayuda a hablarle a Dios. El de los ojos, a ver a Dios. Y el silencio del corazón, como el de la Virgen, a conservar todo en nuestro corazón.” (Madre Teresa de Calcuta)


ANECDOTA  

"El buey mudo"- Santo Tomás de Aquino
Santo Tomás de Aquino

Tomás estudió en Colonia, Alemania, guiado por San Alberto Magno.
Sus compañeros, al verlo tan robusto y silencioso, lo tomaron por tonto, por lo que le pusieron como apodo: "El buey mudo".  Pero un día, uno de sus compañeros leyó los apuntes de este joven estudiante y se los presentó a San Alberto. Al leerlos, éste les dijo a los estudiantes:

-  Ustedes lo llaman el buey mudo. Pero este buey llenará un día con sus mugidos el mundo entero.


Estetica y Santo Tomas de Aquino

Para Santo Tomas de Aquino la belleza es aquello que agrada a la vista, y lo que es agradable o placentero es una de las divisiones de la bondad.
La percepción de la belleza es una especie de conocimiento. Dado que el conocimiento consiste en abstraer la forma que hace a un objeto ser lo que es, la belleza depende de la forma. La belleza, dice, incluye tres condiciones:

a) La primera es la "integridad o perfección" : los objetos rotos o deteriorados o incompletos, son feos.

b) La segunda es la "debida proporción o armonía , que puede referirse parcialmente a las relaciones entre las partes del objeto mismo, pero sobre todo se refiere a cierta relación entre el objeto y quien lo percibe: por ejemplo, el que el objeto claramente visible sea proporcionado a la vista.

c) La tercera es la "luminosidad o claridad" o brillantez". Se relaciona con la tradición neoplatónica medieval, en donde la luz es un símbolo de la belleza y verdad divinas. La claridad es ese "resplandor de la forma que se difunde por las partes proporcionadas de la materia". Las condiciones de la belleza pueden establecerse unívocamente; pero la belleza, siendo parte de la bondad, es un término analógico (es decir, posee diversos sentidos cuando se aplica a diferentes tipos de cosas). Significa toda una familia de cualidades, porque cada cosa es bella a su manera.