Recuerda que cuando abandones esta tierra, no podrás llevar contigo nada de lo que has recibido, solamente lo que has dado: un corazón enriquecido por el servicio honesto, el amor, el sacrificio y el valor.".
San Francisco de Asis
Extractos de cartas del Padre Pío
(Recopilación: P. Gianluigi Pasquale en “365 días con el Padre Pío”)
Noviembre 9
Es una crisis terrible la que atravieso, e ignoro lo que me está reservado.La crisis que atravieso es más espiritual que corporal, pero no es menos cierto que todo el físico siente y participa de manera extraordinaria de todos los sufrimientos de aquel, y que tanto uno como otro se unen para hacer que me marchite en el dolor.
¡Ay de mí!, ¿quién me salvará de esta cárcel tenebrosa?, ¿quién me librará de este cuerpo de muerte? Pero, ¡viva Dios en lo más alto de los cielos! Él es mi fortaleza, Él es la salvación de mi alma, Él es mi porción de eternidad. En Él espero, en Él confío y no temeré mal alguno.
(14 de julio de 1915, a
Raffaelina Cerase, Ep. II, 462)