Vive con serenidad

¿Oh Señor que eres tan adorable y me has mandado a amarte?
¿Por qué me diste tan solo un corazón y este tan pequeño?
-San Felipe Neri.

Quien posee la actitud de la serenidad puede disfrutar de la vida aún en medio de las dificultades.
Recuerda el sabio proverbio: “Enfréntate con calma a la peor emergencia”.
Si no quieres que te abrumen los conflictos, reconoce que la serenidad es la manera más propicia para manejar los problemas y hallarles solución. 

Apoya a quienes veas desanimados, ten siempre una voz de aliento para quienes se sienten derrotados.

Apoya con tus palabras a los desalentados para que les infundas capacidad de superar frustraciones y sobrellevar angustias.

Si hay amor en tu corazón, podrás transmitir confianza, apoyo y esperanza.

Asume hoy una actitud serena, e intenta conservarla como parte de tu manera de ser, y así enriquecerás tu vida.

Noviembre 25
Nadie es inútil, y tú no estás de más. Nunca permitas que te hagan sentir así. Desarrolla lo bueno y lo bello que hay en ti, deja brotar y fructificar lo mejor que tienes, aunque a algunos les parezca poco.

Y si les molestan tus logros o tu forma de ser, eso es un problema de ellos, que tendrán que resolver para estar en paz.

Tú eres obra de Dios y tienes todo el derecho y el deber de ocupar tu lugar en esta tierra. (Mons. Víctor M. Fernández)


Tú quisiste, Señor, que tu hijo unigénito soportara nuestras debilidades, para poner de manifiesto el valor de la enfermedad y la paciencia.

Escucha las plegarias que te dirigimos por nuestros hermanos enfermos y conceda a cuantos se hallan sometidos al dolor, la aflicción o la enfermedad, la gracia de sentirse elegidos entre aquellos que tu hijo ha llamado dichosos, y de saberse unidos a la pasión de Cristo para la redención del mundo.

Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.