"La soberbia no es grandeza, sino hinchazón; y lo que está hinchado parece grande,
pero no está sano"
San Agustin
Extractos de cartas del Padre Pío
(Recopilación: P. Gianluigi Pasquale en “365 días con el Padre Pío”)
Octubre 22
Otras veces, en cambio, me sucede que me encuentro en una gran aridez de espíritu; siento que mi cuerpo se halla en un gran hastío a causa de sus muchas enfermedades; siento que me es imposible poder recogerme y hacer oración, por muy buen deseo que tenga.
Este estado de cosas se va intensificando cada vez más, tanto que, si no me muero, es
un milagro del Señor. Después, cuando al esposo celeste de las almas le agrada poner fin
a este martirio, me manda de repente tal devoción de espíritu que me es imposible
resistir.
En un instante me encuentro totalmente transformado, rico de gracias espirituales
y tan fuerte como para desafiar a todo el reino de Satanás.